domingo, 2 de diciembre de 2012

La creatividad como vía de escape.


A veces nos pasa, por lo menos a esta que está escribiendo, que necesitamos crear, hacer algo nuevo o mezclar elementos ya conocidos para no pensar, por ejemplo, en:

- Esta crisis global, ni en porqué hemos llegado a este modelo social.

- Por qué sigues y seguirás viviendo en la casa de tus padres, ese hogar que te vio nacer.

- Que aunque hoy tengas curro, mañana puedes no tenerlo.

Podríamos añadir otros nosecuantos puntos, en los que a veces nos gusta no pensar, por ejemplo no pensar en por qué no puedo dormir, o no pensar en por qué el enchufismo (caciquismo puro) parece que sigue siendo uno de los criterios de selección de personal, a la hora de llegar a ciertos puestos de trabajo.




Entonces, en esos momentos en los que queremos no pensar, es cuando reúnimos todos esos materiales, ( propios y que la gente nos ha ido dando a lo largo de nuestra corta pero intensa vida) y nos encerramos, mezclando colores, texturas , formas y tamaños. Ya está, en ese momento ha llegado la inspiración para crear y ya nada nos importa, es un momento de abstracción , algo como sumergirnos debajo del agua y bucear, parece que el mundo exterior y su ritmo frenético no existe. Los preocupaciones no existen, la mente se relaja, y se llega a lugares y creaciones fascinantes.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Chismorrea que eso vende